¡Te adelantamos que será muy fácil!
1. Cubre interruptores, enchufes, rodapies y todo aquello que se encuentre en la pared. Para ello, disponemos de cintas adhesivas de nuestra marca Pinamera en diferentes tamaños.
2. Retira todos los muebles y cúbrelos con un cubretodo que realmente tape todo aquello que no quieras que se manche.
3. Protege el suelo con fieltro absorbente de Pinamera y evita limpiar esas gotitas de pintura.
4. Limpia detenidamente la pared, a ser posible con un trapo mojado, ya que esta puede tener polvo y suciedad. Deja pasar entre 5 y 10 minutos para que seque y así la pintura tenga su máxima adherencia.
5. Aplica el fijador Viperluz. Esto sirve para ahorrar pintura y una mejor adherencia.
6. Una vez seco el fijador, aplica la pintura del color que hayas elegido. Normalmente serán dos manos. Para ello, al igual que el fijador, utiliza una brocha para los bordes y rodillo para el centro de la pared.
Deja secar la pintura de la primera mano y una vez seca, empieza con la segunda, pero nunca volver a pintar estando húmeda la pared.
Pero, ¿si quiero volver a pintarla?
1. Si la pared tiene desperfectos, utilizaremos masilla Viperluz para cubrir esos pequeños agujeros y grietas.
Esto debemos realizarlo con una espátula.
2. Posteriormente, una vez seca la masilla, pasamos a lijar toda la pared para alisarla. Luego quitamos el polvo del lijado y aplicamos el fijador con el mismo fin que en el paso 5.
3. Finalmente, cuando quede totalmente seco el fijador, se aplica la pintura usando el mismo patrón que en el paso 6, anteriormente descrito.
¡Visítanos y te asesoraremos!